La escultura del artista ROBERT LLIMÓS titulada MIRAESTELS es una silueta humana con una estrella en la mano y, además de su belleza estética, está preparada para añadirle luces o sensores náuticos que igual pueden usarse para emitir información como para recoger datos de contaminación, temperatura de las aguas u otros. “Se trata de humanizar las boyas técnicas y aportarles belleza y un concepto lúdico”, las define ROBERT LLIMÓS. Nacidas de un homenaje escultórico que LLIMÓS dedicó a JOAN BROSSA, “la idea partió del poema El saltamartí, que se traduce como tientetieso”.

En realidad es un tentetieso blanco de 3,55 metros de altura que flota sobre las aguas y sostiene una estrella de color . “No obstante, también pueden flotar en alta mar y usarse como señalización para bañistas, motos náuticas o entradas de buques”, añade LLIMÓS. Fabricadas en poliéster, se han construido en Marina 92, una empresa de Barcelona ubicada junto a la torre de Sant Sebastià y que antes fueron los Astilleros Vulcano.

El traslado de los talleres al puerto se realizó mediante una grúa, que depositó el MIRAESTELS sobre las aguas. A partir de este momento, el puerto de BARCELONA pasará a las crónicas marineras como un lugar de CATAUNYA donde el mar se hizo arte.